Inteligencia Artificial al servicio: un enfoque novedoso para interpretar bases de datos

Agustín Requelme, William Quiroga y Juan Ignacio González son estudiantes avanzados de la carrera Licenciatura en Ciencias de la Computación de la FCFMyN; acompañados por el Docente Lic. Horacio Thompson, han desarrollado una propuesta innovadora en el campo de la Inteligencia Artificial aplicada a la Ingeniería de Software.

A través de la integración de los Grandes Modelos de Lenguaje (LLMs) y los Grafos de Conocimiento (KGs), crearon una herramienta avanzada que facilita la interpretación precisa y eficiente de la estructura de bases de datos relacionales, mejorando significativamente la accesibilidad de la información por parte de todos los participantes de un proyecto.

La propuesta, titulada “Aplicación de LLMs y KGs para la Interpretación de Bases de Datos Relacionales”, ha sido aceptada en el 12vo. Congreso Nacional de Ingeniería Informática / Sistemas de Información (CoNaIISI) y fue seleccionada entre los seis (6) mejores artículos en la categoría de Trabajos Estudiantiles para ser presentada el próximo 7 y 8 de noviembre en la provincia de Catamarca.

El enfoque permite a los distintos stakeholders, ya sea clientes, analistas de negocio o incluso los propios desarrolladores, acceder a respuestas claras y concisas sobre la información almacenada en una base de datos. “Al modelar la estructura de la base de datos a través de un grafo, desarrollamos una aplicación que permite visualizar y comprender de manera sencilla las relaciones entre los diversos elementos aprovechando el poder de los LLMs”, explicó Quiroga.

El proyecto fue implementado con el modelo Gemini de Google, que mostró solidez en la mayoría de las pruebas. No obstante, se detectaron algunas “alucinaciones” o respuestas incorrectas, que pueden ser potencialmente engañosas. Al respecto, el Lic. Thompson señaló: “La combinación de LLMs y KGs puede contribuir en la detección de los errores que generan estos modelos, por lo que este trabajo resulta un nuevo aporte para evaluar la adaptabilidad y precisión de los LLMs en distintos dominios”. Además, destacó el interés y esfuerzo de los estudiantes: “Me parece fantástico que los chicos se hayan interesado en realizar tareas de investigación porque es una parte importante de su formación. Obtuvieron muy buenas devoluciones por parte de los revisores”.

Este trabajo representa una contribución importante al campo de la Ingeniería de Software, ofreciendo una herramienta novedosa que facilitaría la comunicación y la colaboración entre los distintos actores de un proyecto. “Al mejorar la comprensión de la información de un sistema, nuestro enfoque podría evitar escenarios como interrupciones en la producción, cambios inesperados e incrementos de costos, además de contribuir en la reducción de errores, agilizar el proceso de desarrollo y mejorar la calidad de las aplicaciones”, indicó Requelme. Finalmente, González comentó: “Trabajamos especialmente para este Congreso, estamos muy contentos de haber cumplido con cada instancia de evaluación y de haber sido seleccionados para defender nuestro trabajo en los próximos días en Catamarca”.

Programa de apoyo a la finalización de doctorados: tres físicos seleccionados

Cristian Diaz, Camila Villagrán y Julián Riccardo, fueron beneficiados con una beca que les permitirá finalizar sus tesis doctorales. Los tres, son físicos formados en la Facultad y en esta entrevista nos cuentan qué están investigando y cómo la beca les contribuye a cerrar una etapa importante de sus vidas académicas.

El Programa de Apoyo a la Finalización de Estudios de Doctorado, propuesto por el Consejo de Posgrado de la UNSL en el marco del Programa de Doctorados de la Secretaría de Políticas Universitarias, tiene como objetivo apoyar económicamente la finalización doctorados de docentes investigadores/as de la UNSL.

¿Qué investigas? ¿De qué se trata tu tesis doctoral?

Cristian Díaz: Mi tesis de doctorado se centra en el estudio de un fenómeno conocido como adsorción, y en particular sobre ciertos materiales denominados sólidos porosos, que podríamos imaginar como esponjas a una escala nanométrica. Estos materiales presentan una gran área superficial y una estructura de poros (lo que se conoce como propiedades texturales) que los hace muy interesantes para una amplia variedad de aplicaciones. Una de las principales áreas de interés es su capacidad para almacenar gases, lo que resulta crucial en contextos tanto ambientales como energéticos.

En particular, mi investigación se enfoca en el almacenamiento de gases como el dióxido de carbono (CO2), el hidrógeno (H2) y el metano (CH4), que son de gran relevancia por su impacto ambiental y su potencial como vectores energéticos. Mi trabajo busca comprender cómo las propiedades texturales de ciertos materiales porosos se relacionan con su capacidad para almacenar estos gases, lo que podría tener aplicaciones en el diseño de sistemas más eficientes para el almacenamiento y la captura de gases.

Camila Villagrán: Mi tesis doctoral se centra en el estudio numérico y experimental del fenómeno de resuspensión de partículas bajo la acción de un flujo de aire. En particular, investigo los mecanismos que intervienen en el desprendimiento de partículas depositadas sobre superficies, con un enfoque especial en la influencia que tienen las distintas formas de las partículas.

Julián Riccardo: Mi tesis de doctorado se centra en el estudio de la adsorción de moléculas poliatómicas con estructuras complejas que pueden adoptar diferentes estados conformacionales al adsorberse en diferentes tipos de superficies. Usamos simulaciones de Monte Carlo para analizar este tipo de fenómenos, analizando varios casos como el de varillas rígidas (k-meros) y moléculas flexibles adsorbidas sobre redes de geometría variable. El objetivo principal es proponer una “espectrometría configuracional” de estados accesibles/excluidos que nos permita caracterizar las transiciones de fase orientacionales que ocurren en gases de red de k-meros. Además, proponemos la aplicación de los modelos desarrollados a sistemas biológicos como las proteínas anticongelantes (AFPs), esto para investigar sus mecanismos de absorción en hielo, lo que tiene implicaciones en la comprensión de la vida en ambientes extremos con muy bajas temperaturas (con temperaturas “bajo cero”).

¿Qué carreras has cursado/cursas? ¿Quiénes son tus directores?

Cristian Díaz: Toda mi formación académica la realicé acá en la Universidad Nacional de San Luis (UNSL), donde primero obtuve el título de Licenciado en Física. Luego, con el acompañamiento del Dr. Karim Sapag, director del Laboratorio de Sólidos Porosos (LabSoP), completé una Maestría en Ciencias de Superficies y Medios Porosos bajo la dirección del Dr. Jhonny Villarroel-Rocha. Actualmente, estoy realizando mi doctorado en Física, nuevamente bajo la dirección de Karim y la supervisión de Jhonny. También quisiera destacar el papel fundamental de la Dra. Deicy Barrera, que dirigió mi tesis de licenciatura. Los tres han sido grandes guías, tanto en lo académico como en los desafíos de la investigación.

Camila Villagrán: Soy Licenciada en Física, egresada de la Universidad Nacional de San Luis y actualmente estoy finalizando mi Doctorado en Física en el Instituto de Física Aplicada, dependiente de CONICET.  Mi trabajo doctoral es bajo la dirección de la Dra. Ana Vidales y la Dra. Jesica Benito. Planeo defender mi tesis a fines de este año, entre noviembre y diciembre. Además, me desempeño como Jefa de Trabajos Prácticos en las materias de Física II para Ingeniería en Minas e Ingeniería en Alimentos durante el primer cuatrimestre, y en Física para Farmacia, Bioquímica y TULB en el segundo cuatrimestre. También imparto clases de Física y Matemática en nivel secundario.

Julián Riccardo: Soy Lic. en Física egresado de la UNSL y docente también en la UNSL, en las facultades FCFMyN y FCS . En la actualidad me encuentro cursando el tramo final de la carrera de posgrado Doctorado en Física. Mis directores son el Dr. Antonio José Ramirez Pastor (Director) y el Dr. Pedro Marcelo Pasinetti (Co-Director). Pertenezco al grupo de investigación “Simulación y Mecánica Estadística de Sistemas Complejos” dentro del Instituto de Física Aplicada (INFAP-CONICET-UNSL).

Durante tu doctorado, ¿realizaste estadías de investigación en otros centros, con beca? ¿Puedes contarnos tu experiencia?

Cristian Díaz: Sí, tuve la oportunidad de realizar una estadía en Canadá, en el laboratorio de la Dra. Liliana Trevani en la Universidad del Instituto de Tecnología de Ontario (OnTech), gracias a una beca del gobierno canadiense llamada ELAP. Esta experiencia tuvo un gran impacto tanto a nivel profesional como personal.

Trabajar en un entorno diferente, con un grupo de investigación que tenía su propia cultura y métodos de trabajo, resultó ser muy enriquecedor. Aprendí nuevas técnicas experimentales como espectroscopía Raman, electroquímica y síntesis de otros materiales. Además, la oportunidad de colaborar con investigadores de diversos antecedentes y establecer vínculos durante esta estadía es muy importante, no solo para mi investigación actual, sino que también abre puertas a colaboraciones futuras. Creo que estas experiencias son fundamentales para el desarrollo de un científico, ya que fomentan un intercambio de ideas y conocimientos que son esenciales.

Camila Villagrán: Sí, durante mi doctorado realicé tres estadías de investigación, tanto dentro como fuera del país. La primera fue en Rennes, Francia, en el Institut de Physique de Rennes, Université de Rennes 1. La segunda fue en el Laboratorio de Ingeniería del Instituto Balseiro en San Carlos de Bariloche. La tercera fue en el Laboratoire de Physique et de Métrologie des Aérosols del Institut de Radioprotection et de Sûreté Nucléaire (IRSN) en Saclay, París, Francia. En particular, en esta última estadía gran parte del costo de los pasajes aéreos para trasladarme fue financiado gracias a una Beca de Movilidad Docente otorgada por la UNSL. Estas estadías me permitieron realizar experimentos propios que complementaron el modelo computacional que venía desarrollando, obteniendo resultados muy satisfactorios, muchos de los cuales ya han sido publicados en revistas internacionales. Estas experiencias fueron enriquecedoras, no solo en lo académico, sino también en lo personal, ya que trabajar en distintos laboratorios y enfrentarme a distintas culturas amplió mis habilidades de comunicación y adaptación.

Julián Riccardo: No realicé estadías de investigación en otros centros con beca. Si adquirí una beca para realizar un curso, en Italia, sobre Sistemas Complejos. Lamentablemente, una vez estando allá, el dictado del curso se vio frustrado por la Pandemia COVID19. Me vi obligado a tener que regresar a la Argentina debido a la emergencia sanitaria.

¿Cuáles han sido los principales desafíos que enfrentaste durante tu investigación y cómo los superaste?

Cristian Díaz: Podría destacar dos desafíos principales. Por un lado, como físico experimental, lograr que los experimentos funcionen no es fácil. A veces, los equipos o los experimentos pueden fallar y en más de una ocasión algunos equipos se han roto. En Argentina, reparar equipos de laboratorio puede convertirse en toda una odisea debido a los costos, y a la dificultad para acceder a ciertos repuestos o servicios técnicos especializados.  Por otro lado, mantener la motivación durante el doctorado puede ser un reto, sobre todo después de varios años de estudios y trabajo acumulado. En esos momentos puede ser fácil perder el foco. Afortunadamente, en ambos casos, contar con un grupo de trabajo que siempre está ahí para apoyarse y ayudarse mutuamente ha sido clave.

Camila Villagrán: Uno de los principales desafíos fue aprender a programar ya que no contamos con una formación específica en programación durante la carrera de grado, salvo en una materia en la que se nos da una pequeña introducción a la temática, así que gran parte de lo que aprendí fue de manera autodidacta. Otro gran reto fue la pandemia, que alteró considerablemente los planes de investigación, ralentizando su ejecución. Además, la falta de financiamiento para la ciencia en Argentina ha sido un obstáculo constante. Muchas veces tuve que recurrir a estadías en el extranjero para poder realizar experimentos, ya que en el país no contamos con los recursos suficientes para implementar un laboratorio adecuado para realizar las experiencias. Mis estadías en Francia fueron financiadas en gran parte por convenios y becas externas, junto con ahorros personales.

Julián Riccardo: Un desafío importante que tuve a afrontar a lo largo del trayecto de investigación es el de adaptarme a la redacción de los textos científicos (“papers”), parece algo básico pero poco se trabaja sobre esto durante las carreras de grado y es un aspecto fundamental para la culminación y presentación de un trabajo científico (…) Parte de poder superar este desafío fue de manera autodidacta y otra parte fue buscando apoyo y ayuda en mis directores de tesis y colegas, consultando e intentando aprender de sus experiencias y habilidades. Otro desafío muy importante fue aprender a programar, fase clave en el desarrollo de la investigación por el tipo de trabajo planteado en mi tesis doctoral en donde hacemos uso de simulaciones de Monte Carlo basadas en código programación, que, si bien algo vimos durante el transcurso de la carrera de grado, se necesita un gran aporte autodidacta para poder seguir perfeccionando este aspecto. El poder superarlo también estuvo de la mano de una gran componente autodidacta junto con la ayuda de mi director y codirector. Sin duda, uno de los mayores desafíos -si no el mayor- fue atravesar una pandemia durante el transcurso de la beca doctoral. Esto nos obligó a reprogramar y reorganizar numerosas tareas desde otro enfoque, lo que llevó a un cambio considerable en los tiempos de investigación. Además, fue necesario cumplir con tareas docentes en paralelo y adaptando tanto las tareas de investigación como las docentes al formato virtual.

¿Consideras que la formación que recibes desde la UNSL te prepara para los desafíos del mundo en el día de hoy? ¿Puedes explicar?

Cristian Díaz: Sí, por supuesto. Puede que uno no se dé cuenta del nivel que tenemos hasta que salimos e interactuamos con gente de otros lugares, incluso de otros países, pero al hacerlo nos damos cuenta de que estamos bien formados. Incluso en el caso particular del Departamento de Física, al ser pocos, hay una buena comunicación docente-alumno, lo que fomenta que desde temprano ya vayamos experimentando el ambiente de la investigación. Además, dado que la mayoría de nuestros exámenes finales son de modalidad oral, nos vamos acostumbrando a expresarnos y debatir ideas. También, en el grupo al que pertenezco, solemos tener presentaciones y contamos con la colaboración de numerosos colegas que vienen a nuestro laboratorio a hacer pasantías, colaboraciones, etc., lo que nos enseña el espíritu colaborativo de la ciencia y nos permite aprender de muchas disciplinas relacionadas a la nuestra.

Camila Villagrán: Definitivamente, sí. La formación en la carrera de grado fue fundamental. En mi caso, la mayoría de los exámenes finales fueron orales, con jurados exigentes de dos o tres docentes. Esto me sorprendió cuando trabajé en otros laboratorios, especialmente en el extranjero, donde los exámenes orales no son comunes. La práctica de defender tus conocimientos ante un jurado me otorgó una gran capacidad para hablar en público, una habilidad esencial no solo en lo académico, sino también para comunicar ciencia al público general.

Julián Riccardo: Definitivamente, la formación que recibo en la UNSL me prepara de manera sólida para enfrentar los desafíos actuales, especialmente en campos que combinan simulación computacional y física estadística. El enfoque en el pensamiento crítico, la autonomía en investigación y el acceso a herramientas computacionales modernas me ha permitido estar a la vanguardia en la investigación. Además, la interacción con expertos de diversas áreas científicas dentro de la universidad, así como las oportunidades de asistir a conferencias y colaborar con grupos internacionales, me han dado una perspectiva global y multidisciplinaria, que es esencial para resolver problemas complejos en la ciencia actual.

¿Cuáles son tus perspectivas a futuro luego de finalizar el doctorado?

Cristian Díaz: Como se sabe, investigar va de la mano de enseñar y transmitir conocimientos. Ambas actividades las disfruto mucho. Me gustaría seguir enseñando y compartiendo la física que tanto me apasiona, así como continuar con la investigación, que siempre, al responder una pregunta, nos abre un montón de otras nuevas.

Camila Villagrán: Mi objetivo es seguir investigando. Actualmente, estoy evaluando si continuar con esto dentro el país o en el extranjero. Es probable que este plan se concrete dentro del marco de una beca postdoctoral, que es lo que comúnmente está disponible para quienes finalizan el doctorado en estas áreas.

Julián Riccardo: Después de finalizar el doctorado, mis perspectivas están abiertas tanto en el ámbito académico como de investigación. La idea principal es seguir formándome en la investigación científica a través de la realización de un posgrado, esto sujeto a poder conseguir una beca, nacional o internacional, para poder realizar el mismo. Otra ruta posible, es la de explorar la posibilidad de incorporarme al sector privado o la de poder trabajar en conjunto con este sector.

Investigadores advierten sobre una nueva temporada de incendios en la provincia

La confluencia de factores como las modificaciones en los patrones de precipitaciones y de las temperaturas, sumados a la escasez de verdor en la vegetación, podrían contribuir al desarrollo de incendios forestales.

El equipo interdisciplinar de investigación Gestión Integral de Incendios Forestales está integrado por especialistas de tres Facultades de la UNSL, la de Ciencias Físico Matemáticas y Naturales, Química, Bioquímica y Farmacia y la de Ingeniería y Ciencias Agropecuarias y vienen trabajando en el análisis de diversos datos a distintas escalas, siendo una de ellas las imágenes satelitales e información de distintos sistemas de monitoreo, lo cual  permite observar que están dadas las condiciones para la incidencia de incendios.

Los modelos climáticos dinámicos y estadísticos indican una probabilidad de más de 60 % de desarrollo de una fase fría conocida como La Niña, en el Océano Pacífico Ecuatorial. Este fenómeno, que se caracteriza por una anomalía de temperatura del agua del mar, puede tener repercusiones significativas en el clima global y regional. 

El Dr. Lucas Muñoz, investigador y docente del Departamento de Geología, explica que La Niña suele provocar cambios en los patrones de precipitación y temperatura a nivel global. Para mitigar los efectos adversos de La Niña, es crucial que los gobiernos, las universidades y las comunidades, implementen medidas preventivas. La cooperación entre los organismos del estado es fundamental, ya que juega un papel relevante para compartir datos y recursos que ayuden a anticipar y gestionar los riesgos climáticos. 

Históricamente, La Niña ocurre con una frecuencia inferior a la de su contraparte cálida, El Niño. No obstante, los eventos de La Niña tienden a ser más persistentes, a veces extendiéndose por dos años consecutivos. La fase actual de probabilidad elevada se compara con anteriores eventos de La Niña, sugiriendo un patrón climático que puede repetirse en ciclos de varios años.  

Según el Servicio Meteorológico Nacional Argentino (SMN), los efectos de La Niña sobre el país son diversos y varían dependiendo de la fase, la región y la época del año. “Con La Niña, las lluvias suelen ser bastante escasas, especialmente en la provincia de San Luis, y además también se favorecen las altas temperaturas. Los veranos con el fenómeno de La Niña suelen tener períodos muy cálidos, temperaturas muy elevadas, varias olas de calor y muchos días soleados”, explica.

Algunos datos a tener en cuenta es que el invierno de 2022 en la Argentina fue un 33,3% más seco que lo normal y se posicionó como el 7° más seco desde 1961 y el 5° consecutivo en registrar déficit de lluvias, según datos del SMN. Para el año 2022 en la provincia de San Luis más de 40 mil hectáreas fueron afectadas por los incendios forestales, donde las superficies quemadas fueron analizadas por imágenes satelitales en diversos sectores y localidades, destacando algunos de ellos como Villa de la Quebrada, Suyuque-Los Molles, Buena Esperanza, El Trapiche, Lafinur y el paraje Las Palomas. Muñoz cuenta que “hemos obtenido datos de diferentes sensores para precipitación anual (CHRIPS) y de superficie quemada (Ej MODIs Burn MD61), el cual nos permiten establecer comparaciones con la situación de la Provincia de San Luis para el último periodo 2022-2023 y las proyecciones para el periodo 2024-2025”.

“Desde el grupo de geología lo que estamos aportando es  el análisis y procesamiento de imágenes satelitales y de informaciones disponibles en plataformas y repositorios digitales, complementando con relevamiento de campo. Hay muchos recursos donde se pueden tomar datos climáticos y ambientales. Esas imágenes satelitales disponen un alto background temporal de amplio rango, desde el año 72 aproximadamente hasta ahora, lo que es una gran ventaja. Además, disponemos de la posibilidad de crear y obtener buenos aplicativos”, relata.

¿Pueden analizar factores como la sequía y su incidencia en incendios forestales?

Si, se puede llegar a una aproximación en cuanto a la sequía. Hay indicadores de la vegetación, uno de ellos es el índice NDVI que en español significa índice normalizado de vegetación diferenciada y que nos indica cuánto verdor, densidad y salud tiene la vegetación, que en este caso es el combustible, la fuente para el desarrollo de incendios. Si está más seco o si está más húmedo, nos da una incidencia e información de dónde puede comenzar un incendio. Si bien es un punto complejo, porque las imágenes satelitales muchas veces tienen una resolución de 30 metros. Y un foco de incendio por ahí se desata en un sector de unos pocos metros, pero se puede tener en cuenta un aproximado donde puede haber comenzado.  También hay disponibles imágenes satelitales más sofisticadas que tienen resolución de pocos metros. De un metro, por ejemplo, son indicativos que, a la hora de trabajar con un sistema de alerta temprana, son una buena herramienta. 

Mencionabas que pueden desarrollar aplicativos. ¿Cuáles y con qué funciones? 

La gente informática tiene su campo de desarrollo allí. Se trabaja mucho con lenguaje de programación, con Java, con Python y a su vez, con Google Earth Engine que da la posibilidad de crear una API, es decir,una interfaz de programación de aplicaciones . A través de un celular se puede ingresar y ver las bases de datos espaciales; pero a su vez también se pueden crear aplicaciones para Android, para teléfonos celulares. Para poder visualizar, por ejemplo, dónde están los focos de calor, superficies quemadas o el índice de calor en un determinado sector.

Y las alertas tempranas a las que referías ¿cómo se implementan concretamente? 

Los sistemas de alerta temprana son mecanismos o instrumentos que utilizan sistemas de comunicación integrados con el fin de ayudar a las comunidades a prepararse para los peligros relacionados con el clima, en este caso los incendios, el que a su vez requiere, de políticas públicas localizadas que hagan uso de esas herramientas. Sí un sistema de alerta temprana, se ha implementado a nivel nacional se requiere la articulación con con organismos públicos. Por ejemplo, en este caso con alguien que centralice las acciones como bomberos voluntarios, defensa civil.  Un punto fundamental es desarrollar un sistema integrado. Una de nuestras ideas dentro del proyecto es pensar cómo conectar todas esas partes que por ahí quizás hoy no están del todo conectadas y hacerlo a través de la creación de un dispositivo que reúna todos los datos de los que hemos venido hablando, como por ejemplo a través de un índice de severidad de incendios, el cual refleje determinadas condiciones climáticas como sequía, temperaturas elevadas, escasez de precipitaciones, viento y ubicarlo espacialmente en zonas que son más propensas a que se pueda desarrollar un incendio, por ejemplo.

Han analizado imágenes, datos, distintos índices que les permite pensar que están dadas las condiciones para prestar mucha atención a posibles focos ígneos en la provincia… 

Sí, hemos hecho un análisis preliminar empleando estas bases de datos climáticas, analizando series temporales desde el año 2000 y por un periodo de 20 años, del año 2000 hasta ahora y ya hemos podido determinar una aproximación, de cuál ha sido la recurrencia y la frecuencia y por lo tanto los lugares más afectados. Hemos obtenido datos preliminares, también sobre los índices de verdor, las precipitaciones y algunas otras variables. Actualmente estamos desarrollando un trabajo integrado que reúne información sobre cuáles son las superficies quemadas, cómo influye este fenómeno de ciclos más húmedos, los ciclos  de sequía, ciclos neutrales y su conexión con los incendios forestales.

Como investigador que realiza sus tareas en la provincia, ¿cuál es tu posición respecto de la necesidad de que los tomadores de decisión conozcan estas herramientas, estos datos, para la implementación de acciones de cuidado y de prevención?

Es fundamental. Y también lo es aportar desde la Universidad Nacional de San Luis todos estos datos con los que contamos. Como organismo público podemos desarrollar y podemos investigar y aportar conocimiento integrando las nuevas tecnologías. Es una satisfacción mutua otorgar esta información a tomadores de decisión para que no seamos entes aislados. Y como ciudadano y ser humano que es relevante también hacer este aporte. 

Integrantes del Proyecto Gestión Integral de Incendios Forestales: 

Director del Proyecto: JAUME, DANIEL ALEJANDRO

Grupo Responsable: PATRICIA ESTELA VERDES Investigador integrante; ELISA MARGARITA PETENATTI Investigador integrante; RAÚL HORACIO LÓPEZ Investigador integrante; GUILLERMO ENRIQUE OJEDA Investigador integrante; MARIA GISELA DORZÁN Investigador integrante; Grupo Colaborador: BRIAN LUCAS MUÑOZ Investigador; HECTOR DANIEL GOMEZ Investigador; MARIA TERESA TARANILLA Investigadora; MARCO PULITI LARTIGUE Becario; JOHANA MEDINA Becaria; LUIS GONZALO MOLINA Becario; LUIS ANGEL DEL VITTO Investigador; MARIA VIRGINIA PRINCIPE Investigadora; JAEL ARANDA Investigadora; VALERIA CORNETTE Investigadora; CECILIA LARTIGUE Investigadora; BEATRIZ ROMERO Investigadora; JORGE LEPORATI Investigador; MAXIMILIANO RIGLOS Investigador; EDILMA OLINDA GAGLIARDI Investigador; PABLO PALMERO Investigador; MARCOS PASCUALI Investigador; SILVINA SAIBENE Investigadora; XIOMARA CARBONELL Investigadora; MARIA ESTRELLA MUÑOZ Investigadora; LUCIA MIRANDA MOLINA Becaria; MARIA GUADALUPE DEL VITTO Estudiante.

Una spin-off que ofrece soluciones y respuestas informáticas frente a la crisis climática global

Mauricio Hanzich es un informático argentino radicado en Barcelona, España. Desde hace unas semanas se encuentra en la provincia, y estuvo dando una charla en el Departamento de Física de la Facultad. Su presentación titulada “Modelización de la investigación y la innovación en ciencia e ingeniería. Modelización de riesgos naturales y servicio climático: Cómo hacerlo”, puso el eje en la vinculación ciencia-innovación.

Hanzich es parte del equipo del Centro de Supercomputación de Barcelona y tiene amplia experiencia en el desarrollo de Computación de Alto Rendimiento y software complejo.  Su experiencia laboral le ha permitido trabajar en la academia, la ciencia, y ahora, como emprendedor. Durante su charla, compartió la experiencia de creación de “Mitiga Solutions” una empresa que aprovecha los aportes de la ciencia y la tecnología para contribuir a un mundo que enfrenta un clima cambiante.

“He venido a contar un poco de mi historia. Empecé estudiando, después empecé a trabajar en consultoría para empresas grandes, pequeñas, hice academia, di clases un montón de años. Pero también hice investigación en centros de investigación y ahora la última aventura es emprender. Encontrar a alguien que haya pasado por todo esto y pueda contar la experiencia, no es típico. Y entonces, cuando me dan la oportunidad hago eso, hablo de mi experiencia, a ver si a alguien le sirve para algo”, comenta.

¿Y emprendiendo en qué?

Esa es una buena pregunta. El proceso de emprender, en mi caso particular, vino por una inquietud personal de que la investigación llegara a la sociedad y que tuviera un impacto. En particular, la empresa de la que estamos hablando ahora es una spin-off del Centro Nacional de Supercomputación en Barcelona. El tópico específico ahora mismo es riesgo climático, pero al final del día creo que es un poco anecdótico. Da igual lo que hagas, lo que importa es el camino que hay que recorrer para tener impacto y llegar a la sociedad.  

Trabajan desde el campo de la informática en cuestiones vinculadas a la crisis climática. ¿Colaborando con empresas, con estados, con quiénes?

Tenemos proyectos con Naciones Unidas, pero también con grandes empresas del sector de los seguros y el inmobiliario. Depende de qué se trate específicamente y gracias probablemente a nuestro background, trabajamos con todos los sectores: el público, el privado, la academia, la investigación, pero sobre todo la industria, porque el objetivo es tener impacto, o sea que la ciencia, tenga un impacto en la sociedad.

Mencionaste a los seguros. ¿Ustedes simulan situaciones en las que el clima afecta ciudades, edificios, personas? ¿Cómo trabajan?

Te voy a dar un ejemplo que es muy concreto y desde hace poco tiempo y del cual estoy muy orgulloso porque creo que describe bien cuál es la vocación. Hace alrededor de tres meses, hubo unas inundaciones muy grandes en Porto Alegre, en Brasil. Como empresa habíamos estado un tiempo antes en Brasil hablando con el gobierno, con instituciones y empresas acerca de productos, servicios y colaboraciones a nivel de investigación o comerciales.  Y, cuando les pasó literalmente el agua por encima, se acordaron de esto y nos llamaron. Fue un viernes al mediodía y necesitaban saber fundamentalmente cuánto dinero tenían que poner para empezar a arreglar la catástrofe.

O sea, necesitaban saber, cuántos ceros tiene que tener el número que requería esa inversión. Sabemos que el número es grande pero la cantidad de ceros es importante y no es evidente. Entonces, gracias al background, gracias a los servicios que tenemos, datos, sistemas, etc., sacamos una métrica basada en la ciencia y en ese mismo fin de semana pudimos dar una respuesta. El lunes al mediodía el Presidente Lula, informó públicamente cuánto dinero iba a poner Brasil para empezar a paliar la catástrofe en función de los datos que “Mitiga Solutions” le había dado. Lo hicimos en un fin de semana. Ahora esto, lo estamos transformando en un producto. Eso para mí, es impacto. Con el trabajo, no de un fin de semana, sino de décadas de la gente que está ahí trabajando en clima, en data science, en ingeniería. Esto es un aporte multidisciplinar.

En la actualidad solemos encontrar posturas contrarias a la ciencia, incluso negadoras del cambio climático. ¿Cuál es tu posición respecto de la necesidad de vincular los aportes de la ciencia y de la tecnología a la toma de decisión? Porque de última, para que puedas llegar a tener un impacto real en la sociedad necesitas del factor político que es indispensable.

La realidad, al final, siempre supera a la ficción. Entonces, podemos negar hechos, podemos afirmarlos, podemos hacer lo que nos dé la gana que luego la realidad va a ser la que sea. Entonces, si nos basamos en ciencia para decir lo que decimos, una de las ventajas fundamentales es que no tenemos que tener fe. Porque al final estamos intentando basar las cosas en hechos, pruebas y evidencias. Eso no significa que sea super preciso, no significa que no te vas a equivocar, porque siempre hay muchas incertidumbres, sobre todo si te estoy diciendo qué es lo que va a pasar en 2050 seguramente tengo un nivel de incertidumbre alto. Pero es mucho mejor que no tomar decisiones informadas. Entonces, ¿creo que esto es importante? Sí. ¿Creo que va a cambiar? Sí, porque la realidad te va a obligar.

Todo lo que tiene que ver con el cambio climático, y no es porque lo digo yo, es porque lo demuestra la ciencia que está detrás de mí, que son cientos y cientos de investigadores avalados por hechos y evidencias. En los siguientes cinco o seis años es probable que haya la misma cantidad de catástrofes naturales que en los últimos 30 años, porque es lo que se ve en la tendencia, es probable. Entonces la pregunta que hay que hacerse es ¿Qué vas a hacer? Eso ya es una decisión informada y está basado en hechos y evidencias, no es una opinión.

Investigación e innovación tecnológica: la creación de agentes conversacionales

Las noticias sobre el desarrollo de nuevas tecnologías son parte de nuestra cotidianidad. Todo el tiempo podemos informarnos y sorprendernos sobre distintos avances y productos que aportan soluciones a diversos problemas y necesidades sociales. Detrás de esas innovaciones hay mucha investigación, meses de prueba y error y equipos que trabajan para optimizar estas herramientas y llevarlas al mercado.

El Laboratorio de Computación Gráfica de la FCFMyN, dirigido por el Mcs. Roberto Guerrero, es el escenario en el que se lleva a cabo el Proyecto de investigación denominado “La Realidad Extendida en la Comunicación de Información para el Metaverso”. En este espacio trabajan con Realidad Extendida, un concepto que incluye la Realidad Virtual, la Aumentada y la Mixta. Estas herramientas se han convertido en un recurso muy valioso para proveer de recursos a distintas tecnologías que requieren entregar a los usuarios, información de forma rápida y eficiente.

El famoso Metaverso que fue presentado con algarabía por empresas multinacionales, viene poniendo a prueba algunas aplicaciones y prometiendo el desarrollo de mundos virtuales paralelos que permitan el despliegue de tareas de diversa complejidad. Una de ellas, está relacionada a los agentes conversacionales. ¿Qué son y qué implican?

Guerrero, explica que son programas de computadora diseñados para simular conversaciones humanas. Estos agentes, a menudo llamados chatbots o asistentes virtuales, utilizan técnicas de inteligencia artificial, como el procesamiento del lenguaje natural para entender y responder a preguntas y solicitudes de los usuarios. Se emplean para brindar atención al cliente, en educación, entretenimiento y como asistentes personales, entre otras funciones.

Para que esos agentes conversacionales logren responder de manera natural y fluida, se trabaja en el diseño de códigos e interfaces que lo posibiliten. Hay experiencias con mejores resultados en las aplicaciones que solo implican sonido, pero ¿qué pasa con las que implican interactuar con un agente corporizado?

“Si tiene una representación física, que obviamente es una representación virtual, un avatar, un cuerpo, es un agente corporizado con el que el usuario puede conversar. El diseño y desarrollo de ese cuerpo, tiene que ver con poder aumentar o perfeccionar la transmisión de información.  ¿Por qué? Porque más allá de que estamos formados en la lectoescritura, para los seres humanos es mucho más fácil hablar y transmitir información verbal. El agente conversacional va a interpretar lo que el usuario dice, lo va a procesar y va a dar una respuesta verbal.

El agente conversacional procesa el sonido que emite el usuario para desglosarlo en palabras, para sacarle un contenido y la semántica. Busca hacer un “razonamiento” para encontrar una respuesta, lo convierte en oraciones, en frases verbales, incluso en el idioma que emplea el usuario y después lo vocaliza”, explica.

¿Cómo entra en juego la IA (Inteligencia Artificial) en estas aplicaciones? ¿Cuáles son las limitaciones que presenta para el entendimiento de ciertos modismos en el habla y cómo abordan esas dificultades?

No es fácil. Esta tecnología está naciendo, falta rato, pero se visualiza como algo con mucho potencial. Ha tenido un aceleramiento muy grande desde el 2020 gracias a ciertos aciertos y movimientos que lo han favorecido. La globalización es uno de esos factores. En el caso de la IA, el gran puntapié se dio cuando lo pusieron a prueba en forma gratuita para todo el mundo, con lo cual ahí se aprovechó la curiosidad de la gente; y ese uso está ayudando a desarrollar la herramienta. Estamos hablando de informática y esta se basa en matemática y por lo tanto poder hacer una deducción y un razonamiento que es intelectual, que es algo que es muy cerebral y no matemático, conlleva la búsqueda de conclusiones y deducciones de manera estadística. Entonces, realmente el agente no está razonando, está sacando estadísticas. Ahora, cuanto mayor es la población de información y de datos, la estadística va a ser también mejor.

La IA, no es algo nuevo. Surge como concepto en los años ‘60 como muchas cosas de la informática, lo que pasa es que nunca se pudo implementar porque la tecnología no lo permitía. Cuando aparece la computación, se habilita esta capacidad y cuando se abre al público, se incrementa el aporte de datos lo que permiten perfeccionar la estadística, la que comúnmente es interpretada como “razonamiento”.

El razonamiento humano no funciona a través de cálculos matemáticos, o cálculos probabilísticos. Es más bien, un compendio de factores y elementos que tienen que ver con la experiencia vivida, las relaciones, las emociones, los intereses que se combinan para elaborar un razonamiento y llegar a una conclusión, buena o mala, no importa, pero llegar a una conclusión. A la IA le falta todo eso, le falta el sentimiento, le falta la experiencia, le falta la vivencia. Simplemente saca una estadística, lo que obviamente para ciertas áreas está perfecto.

¿Qué complejidades entran en juego cuando ese agente conversacional debe tener una forma humana, o ser un cuerpo hablante?

“Los humanos estamos acostumbrados a hablar con alguien físicamente visible, no hablar con una pared. Lo importante en la comunicación y en la transmisión de información, es la cara, es el cuerpo, es algo físicamente visible. ¿Cuál es el problema acá? Necesitamos ver caras y cuerpos realistas. Durante la comunicación necesitamos ver gestos, el parpadeo de quien nos habla, identificar la concordancia de los labios con el sonido que se emite, los movimientos del cuerpo y hacer un personaje fotorrealista, requiere simular todo eso. Es muy complejo.

Ese agente, además de tener todas esas características humanas, debe interpretar el sonido, descomponerlo, interpretar la semántica, encontrar un “razonamiento” y dar una contestación. El desafío es hacer agentes conversacionales lo más fotorrealistas posible o desarrollar agentes que tengan un aspecto más cercano a una caricatura y que ofrezca una presencia, una inmersión, una emoción. Y, de hecho, eso lo hace Walt Disney desde hace muchísimos años.

Los dibujos animados generan emociones y son parte de las vivencias humanas. Podemos reconocer comportamientos y distintas personalidades en una caricatura; incluso éstas nos permiten hacer comparaciones con seres que realmente existen y encontramos en ellas similitudes a personas que conocemos o a nuestras propias mascotas, por ejemplo. En ello estamos trabajando”.

El equipo viene trabajando junto a colaboradores externos desde hace tiempo. ¿En qué, específicamente?

“En este laboratorio hemos trabajado en simulación. La informática en general se basa en las simulaciones. En algunas se requiere el diseño de espacios que sean muy específicos y muy veraces, pero hay otras donde simplemente lo que se necesita es probar el concepto. Después, físicamente, se puede observar si hay alguna diferencia o alguna discordancia, pero en principio se simula. Desde la computación gráfica trabajamos mucho con estas herramientas de simulación que permiten, ente muchas cosas, acelerar procesos. En la industria se utiliza mucho, no solo para acelerar tiempos sino también para optimizar costos y recursos.

Hemos trabajado con investigadores de España. Ellos tienen un convenio con la Red Nacional de los Ferrocarriles Españoles (RENFE) que maneja también la red de trenes de alta velocidad. Este organismo, permanentemente está haciendo el rediseño de sus trenes para acelerar la velocidad, disminuir los tiempos, planificar los cambios de motores, de formas, entre otras. Nosotros tenemos una cava en la que simulamos y diseñamos el interior del tren. Pensar y simular cómo debería ser la forma del tren desde el interior, la disposición de los asientos para una mejor circulación y para evitar problemas, por ejemplo, ante un accidente y probar modos de acelerar la evacuación. Eso se programa, se simula y en la cava se prueba y se interpreta qué tan bueno o tan malo es el prototipo que se diseñó para recién después construirlo”, concluye.

Los agentes conversacionales están demostrando ser herramientas poderosas y funcionales para muchas aplicaciones de la vida actual. La investigación científica en estos temas se torna fundamental para abordar los desafíos que aún persisten, como la privacidad de los datos y la creación de experiencias verdaderamente personalizadas.

*El equipo del Proyecto de Investigación de la FCFMyN “La Realidad Extendida en la Comunicación de Información para el Metaverso” que dirige Roberto Guerrero está integrado por los/as investigadores/as María Fabiana Piccoli, Jacqueline Fernández, Graciela Rodríguez, Luis Pasinetti y los becarios Emiliano Novelli y Yoselie Alvarado. Francisco Serán Arbeloa de la Universidad de Zaragoza, España y Silvia Castro, de la Universidad Nacional del Sur, son parte de los asesores externos del Proyecto.  

Descubriendo científicos, un proyecto que se extiende en el territorio

Un equipo de investigadores, docentes y estudiantes de las Facultades de Ciencias Físico Matemáticas y Naturales y de Química, Bioquímica y Farmacia, trabaja con escuelas del interior provincial en talleres científicos donde niños y niñas aprenden jugando.

Descubriendo científicos es un proyecto de extensión, financiado por la Secretaría de Políticas Universitarias y dirigido por Myriam Villegas (FCFMyN), Alicia Panini y Liliana Villegas (FQByF). Desde hace varios años vienen trabajando con el objetivo de promover el interés por la ciencia en las infancias, a través de actividades experimentales de ciencias naturales y matemáticas en escuelas alejadas de los centros urbanos.

“Desde nuestro lugar de educadores nos proponemos acompañar a las escuelas alejadas desde lo geográfico o cultural de la ciudad de San Luis. Después de la pandemia y aun habiendo regresado a las actividades escolares con presencialidad plena, persiste el abordaje de las ciencias exactas y naturales con baja o nula actividad experimental. Proponemos, desde la mirada de la alfabetización científica, talleres experimentales que aporten no solo los conocimientos propios de las ciencias involucradas sino también para dar a los estudiantes la posibilidad de vivenciar el proceso de la indagación científica”, detalla Villegas.

Este proyecto se focaliza en el nivel primario, aunque por las características de algunas escuelas, las actividades se han extendido al nivel inicial. “Hemos elegido el nivel primario porque la evidencia científica nos señala el valor y la importancia de incorporar algunas capacidades del pensamiento lógico y científico a edades tempranas. Sabemos desde la investigación que cuanto antes los incentivemos hacia la ciencia, más probable es que cuando deba escoger una carrera, tengan entre sus posibilidades de elección, una carrera de científica”, subraya.

El equipo está trabajando con las escuelas N° 204 Maestro Nemesio Villegas en la localidad La Carolina, la Nº 192 Maestro Rural Puntano en Donovan, la N° 22 Historiador Urbano J. Nuñez en Fraga y está previsto después del receso de invierno, visitar la Escuela N°157, Granadero Juan Enrique Lozano ubicada en el paraje Duraznito y la N° 381 Soldado Puntano ubicada en Pampa del Tamboreo. Los Talleres son variados, entretenidos y dirigidos a distintas edades.

“Tenemos un menú de experiencias de matemática. Una de ellas consiste en trabajar a partir de una receta de cocina con una comida destinada a 4 personas. Los chicos y chicas deben hacer los cálculos que le permitan hacer esa comida para todo el curso e incluso toda la escuela. Esta actividad está destinada a estudiantes de 4º a 6º grado”, explica.

En todos los talleres, los niños y niñas experimentan, piensan, observan y sacan conclusiones que luego comparten con sus compañeritos.  “Una de las actividades de biología, consiste en buscar plantas en el patio y analizarlas en el microscopio. Allí ven las particularidades de esas plantas e incluso si tienen usos medicinales. En química hacen el slime, una especie de gelatina elástica y viscosa. Este experimento nos ayuda a hablar de conceptos cono los polímeros y los estados de la materia. Esta actividad la destinamos a todos los estudiantes, de toda la escuela y se llevan el slime de regalo. Para los más grandes trabajamos con levaduras para ver qué son los microrganismos si son seres vivos o no, para ello observan levaduras con distintos dispositivos e incluso microscopios y eso es algo que llama la atención porque no todas las escuelas tienen estos instrumentos y es una actividad en la que se suman activamente los docentes”, relata Villegas.

Los más pequeños aprenden sobre el uso adecuado de medicamentos a través de una obra de teatro. Esta estrategia didáctica permite la interacción para saber qué hacen cuando están enfermos, dónde se deben comprar las medicinas, las diferencias con las golosinas y los cuidados que hay que tener.  En física, los más chicos juegan con el armado de aviones de papel diseñados en distintos tamaños y con distintos tipos de papel. Observan y registran cuáles vuelan mejor y por qué.  También realizan un experimento con magnetismo. Trabajan con imanes y a través del juego, aprenden qué materiales tienen esta particularidad.

“En temas de nutrición, trabajamos con el armado de una mini heladera para pensar dónde y cómo guardamos los alimentos. En base a sus relatos, se van señalando y sugiriendo cambios en hábitos y costumbres que suelen ser erróneas. Observamos por ejemplo el cuidado de fecha de vencimiento, las temperaturas de conservación, etc. También llevamos a cabo un taller sobre etiquetado. Se les enseña a leer las etiquetas y diseñamos una etiqueta para un alimento nuevo, que inventamos en el aula”, cuenta.

“Las autoridades, docentes y estudiantes de las escuelas, siempre nos han recibido muy bien y con mucho entusiasmo. En las que están alejadas de la ciudad, nos esperan con mucha ansiedad. La recepción de docentes y estudiantes, siempre ha sido formidable”, remarca Villegas.

En el proyecto de extensión colaboran y participan muchos estudiantes de ambas facultades; “los estudiantes son espectaculares y se van sumando. Son muy comprometidos y responsables. Valoran salir de la universidad, ver otras realidades y trabajar en el territorio. Además de las actividades que llevamos, hacemos meriendas y compartimos un lindo momento con las escuelas que visitamos”, señala.   “Nos interesa contagiar nuestra pasión por hacer ciencia, despertar la curiosidad por saber más, hacer una pregunta e intentar responderla, medir, sacar conclusiones, observar y siempre desde el juego como propuesta pedagógica”, concluye.

La matemática como herramienta para resolver problemas comunes a diversas disciplinas

Patricia Morillas dirige el proyecto de investigación de la FCFMyN, denominado Álgebra Lineal y Análisis Matricial. Junto a un grupo de expertos nacionales e internacionales buscan soluciones teóricas a problemas que pueden acontecer en la medicina, en las ingenierías y en otras ciencias.

Patricia es doctora en matemática e investigadora adjunta de CONICET. Desde hace muchos años desarrolla su trabajo investigativo en el Instituto de Matemática Aplicada, IMASL, de doble dependencia UNSL-CONICET.  “La matemática como disciplina científica es el lenguaje en el que está escrito la ciencia” enfatiza Patricia y adelanta que con su equipo, buscan respuestas a problemas que se pueden presentar en áreas como procesamiento de imágenes médicas, de datos meteorológicos y satelitales, entre otros. 

En esta entrevista, la investigadora nos detalla qué temas trabajan y qué conocimientos y aportes generan desde este proyecto. “En este proyecto se desarrollan distintos tópicos de Álgebra Lineal y Análisis Matricial, especialmente en Teoría de Marcos y Teoría de Matrices de Distancia. Los temas que se estudian están motivados en cuestiones que aparecen en las aplicaciones en ciencias e ingeniería, donde se tienen que procesar datos”.

¿Por ejemplo, qué tipo de datos?

Los datos surgen en general de tomar mediciones de parámetros físicos. Puede tratarse de distancia, volumen, peso, presión, voltaje, entre otros.

¿De qué trata la Teoría de Marcos?

Un marco para un espacio vectorial es una familia de vectores que permite representaciones estables y no necesariamente únicas de los elementos del espacio, posibilitando elegir la representación más adecuada. Son robustos frente a la presencia de diferentes tipos de errores y a borrados, y dan mayor flexibilidad al momento de construirlos de modo tal que tengan determinadas propiedades.

Una de las aplicaciones más importantes que tienen los marcos es en el procesamiento de señales. Una señal es un tipo de dato que se representa como un vector y corresponde a medidas de parámetros físicos que puede ser de naturaleza eléctrica, acústica, magnética, mecánica, óptica, etc. En el procesamiento de estas señales, primero se toman medidas de los parámetros físicos y luego esas medidas se transmiten. En este proceso pueden aparecer errores en los datos o algunos de ellos se pueden perder. En otros casos, sólo se conocen los valores absolutos de las medidas. Se hace necesario entonces que el receptor pueda reconstruir la señal lo mejor posible. Los marcos resultan adecuados para estas situaciones.

También puede suceder que se deba procesar una gran cantidad de datos. Una forma de abordar esto es procesarlos en forma distribuida, es decir, dividiendo la información, transmitiendo cada parte y luego juntando/fusionando lo obtenido. Eso dio origen a los marcos de fusión que son familias de subespacios y pesos. Los marcos y los marcos de fusión son útiles en áreas tales como procesamiento de imágenes médicas, de datos meteorológicos y satelitales, en teoría de códigos, entre otras.

Ejemplos de marcos ajustados:

El otro tema que mencionó son las Matrices de Distancia. ¿Qué son y qué aplicaciones tienen?

En algunas aplicaciones sólo se pueden determinar las distancias entre los objetos y luego se requiere con esa información saber cómo se encuentran ubicados. Una situación de este tipo se da en química cuando se busca conocer la forma de una molécula basándose en las distancias entre los átomos. Para poder realizar esto con herramientas del álgebra lineal se utilizan las matrices de distancia.  Una matriz de distancia tiene como entradas las distancias al cuadrado entre los puntos. A partir de propiedades de esta matriz se pueden conocer características del conjunto de puntos.

Además del estudio de conformaciones moleculares, las matrices de distancia se utilizan, por ejemplo, en la localización de sensores y en la calibración de tomografías de ultrasonido.

¿Qué problemas específicos se estudian en el proyecto?

Los problemas que se estudian surgen de aplicaciones concretas o bien surgen como desarrollos teóricos.

Se aborda el estudio de matrices de distancia particulares, como matrices celda y matrices elípticas. También propiedades geométricas de espacios de matrices de distancia. Se estudian distintos tipos de marcos y marcos de fusión, dualidad, reconstrucción óptima en presencia de borrados y errores, y reconstrucción aproximada. También se estudia la relación entre ciertos marcos y los diseños t-esféricos que aparecen en combinatoria.

¿Cómo está integrado el proyecto?

Además de docentes de la Universidad Nacional de San Luis, el proyecto tiene integrantes que son docentes de la Universidad de San Andrés, de la Universidad Nacional del Nordeste, de la Universidad Nacional de San Juan e investigadores de CONICET. Se trabaja también con matemáticos de Austria y Estados Unidos.

Participan alumnos de posgrado de la Facultad de Ciencias Físico Matemáticas y Naturales de la Universidad Nacional de San Luis. Durante el desarrollo del proyecto se han dirigido tesis de postgrado y trabajos finales de grado en matemática.

Nota: Unidad de Cultura Científica más Innovación (UCC+i) | FCFMyN

Doctorado en Ciencias Matemáticas: un sueño alcanzado

Rosa Lorenzo defendió su tesis de posgrado para acceder al título académico de “Doctora en Ciencias Matemáticas”. El trabajo se tituló “Mejores Aproximantes en Espacios de Orlicz” y fue dirigido por el Dr. Sergio Favier y la Dra. Sonia Acinas.

“Rosita”, como todos la conocen en la Universidad, estudió la Licenciatura en Ciencias Matemáticas, luego realizó la Maestría en Matemáticas y posteriormente el Doctorado. Sus primeros pasos profesionales en la Universidad fueron como auxiliar de segunda alumno, cargo que ganó al finalizar el segundo año de la Licenciatura. Posteriormente se graduó y continuó con la actividad docente como auxiliar de primera. Actualmente se desempeña como Secretaria Académica de la Universidad Nacional de San Luis, pero sigue ejerciendo como docente en el Departamento de Matemática. “Desde septiembre del 2019 comencé a trabajar en gestión, en un principio como Secretaria Académica de la FCFMyN, y posteriormente, en septiembre del 2022 como Secretaria Académica de la UNSL. Sin embargo, nunca dejé de ser docente, continué en las aulas aún durante la gestión porque creo que son espacios realmente valiosos” nos comentó.

Rosa es de General Alvear, provincia de Mendoza, y fue durante los últimos años del secundario cuando se acercó a las matemáticas decidiendo estudiar la Licenciatura en San Luis. “Cuando finalicé mis estudios secundarios, me gustaba mucho la matemática. La profesora que daba la materia había estudiado en San Luis y fue ella quien me acercó a la carrera. En cuarto año cursé las optativas que estaban en el plan de estudios y a partir de ahí me incliné por el Análisis Matemático. Luego, empecé a trabajar con el doctor Felipe Zó que era el director del grupo de investigación de aproximación de funciones y con el doctor Sergio Favier. Una vez que me recibí de Licenciada empecé a hacer la Maestría en Matemática, y luego, en el 2021 me inscribí al Doctorado continuando la línea de investigación de aproximación de funciones que había realizado con el doctor Favier en mi maestría y recibiendo nuevos aportes de la codirectora de mi tesis doctoral, la doctora Sonia Acinas de la Universidad Nacional de La Pampa”.

En su trabajo de tesis doctoral, Rosa investigó un espacio de Orlicz que está generado por una N función que puede ser no diferenciable y donde a los elementos de ese espacio se lo aproxima por polinomios algebraicos de grado a lo sumo N. A partir de aquí, se hace una caracterización de estos mejores aproximantes y esto permite luego hacer una extensión. Esto significa que las funciones que estaban inicialmente en ese espacio de Orlicz generado por la N función, pasan a estar en un espacio generado por la derivada por derecha, dado que la función original no es de clase C1, sino que puede carecer de derivadas en algunos puntos. “El aporte principal de esta investigación fue lograr la caracterización de mejores aproximantes, lo que fue una generalización del trabajo que realizaron durante 2015 Acinas, Favier y Zó y también extender un trabajo del 2019 de los mismos autores. Es decir, hicimos esa extensión, probamos la existencia del mejor aproximante y probamos la unicidad, pidiendo ciertas condiciones a la derivada por derecha como que sea estrictamente creciente. Y después comenzamos a estudiar cuestiones que tenían que ver con la acotación de los coeficientes de este mejor aproximante polinomial extendido, mejorar esas estimaciones con el estudio de una maximal que permitió mejorar esas estimaciones que habíamos obtenido previamente. Y luego, en el caso de que los polinomios sean las constantes, obtuvimos resultados de convergencia modular que también era importante para el trabajo de investigación, donde introdujimos otra maximal y pudimos compararla con la máxima de Hardy-Littlewood” nos comentó la investigadora.

Concluir una etapa

“Finalizar esta etapa del doctorado me trajo muchos sentimientos, yo provengo de un hogar muy humilde, cuando vine a estudiar mis padres no me podían ayudar económicamente. A pesar de eso, me vine igual a probar si podía lograrlo. Los primeros años fueron muy difíciles… Después nació mi hijo mientras estaba cursando la Licenciatura, pero nunca dejé de soñar con el objetivo que para mí era el doctorado. Si bien fue complicado, porque tenía que estudiar y trabajar… y también ser madre, siempre tuve muy en claro que quería recibirme. Porque creo que, sobre todo para las personas más humildes que no tenemos otras formas de progresar y mejorar nuestra situación, tener un título universitario te ayuda un montón. Y a mí en ese caso, me cambió mi historia. Me permitió ayudar a mi familia, a darle un estudio a mi hijo, (…) es un sueño cumplido” expresó la Doctora en Ciencias Matemáticas. 

Además, conversamos con Rosa sobre su recorrido en la Facultad y sus vivencias con las personas que la acompañaron en este trayecto. “Tengo recuerdos muy lindos de la carrera y de la facultad, sobre todo en la licenciatura. Recuerdo que éramos muy poquitos estudiantes y que en ese sentido no éramos solo un número para los profes. Sabían no solo nuestro nombre, sino también nuestra situación y muchas veces nos ayudaban. Cuando nació mi hijo, por ejemplo, todos los profes del departamento me ayudaron y eso se los voy a agradecer toda la vida. La parte humana fue fundamental para mí y para alcanzar este objetivo” subrayó.

Para el futuro, Rosa tiene su atención puesta en el posdoctorado, por lo que ya se encuentra planificando en esa dirección. También nos compartió que le gustaría seguir haciendo investigación y docencia y dejó una palabra para sus colegas “si uno tiene claro lo que quiere tiene que hacerlo, más allá de lo que pase en el camino. No importa cuántas veces uno se caiga, lo importante son las veces que uno se levanta. Yo creo que nunca hay que abandonar los sueños, que si bien a veces es difícil hay que seguir adelante. En la carrera de matemática no es simple, porque somos pocos y también es difícil explicar lo que hacemos. No importa lo que pase en el camino y no importa cuánto tarden, lo importante es llegar” finalizó.

Conocer las entrañas de la tierra: ¿Qué secretos esconden las sierras de San Luis?

Augusto Morosini. Dr. En geología. Depto. De Geología FCFMyN. Director del Proyecto “Estudio de la estructura cortical en la provincia de San Luis usando técnicas geofísicas y geológicas”.

Un equipo de investigación liderado por el Dr. Augusto Morosini, estudia las particularidades de las formaciones geológicas de San Luis, su origen y evolución histórica. Para hacerlo, emplean técnicas geológicas y geofísicas que les posibilitan saber más sobre el paisaje que nos rodea.

El grupo de investigación tiene múltiples inquietudes y cada una de ellas implica desafíos técnicos y científicos que se ponen en juego sobre el territorio. Trabajan en zonas diversas y con particularidades bien marcadas. Por ejemplo, estudian las estructuras más antiguas que se formaron hace 450 millones de años o más, así como las actuales o más modernas, y de ambas, analizan lo que es visible como lo que se esconde en el subsuelo.

Emplean técnicas geofísicas que permiten ver e interpretar el subsuelo sin perforar el terreno, Morosini explica que “dentro de estas técnicas hay por lo menos dos o tres que son las más importantes, una es la geoeléctrica con la que aplicamos corriente en el terreno y podemos conocer la respuesta del subsuelo para poder modelizarlo. También la sismología nos posibilita aprovechar los sismos naturales y a través de estaciones sismológicas detectar esas señales y conocer aproximadamente, qué es lo que está pasando en el interior de la tierra”.

Pero no se limitan solo al empleo de estos recursos. Hacen uso además, de otras técnicas como la gravimetría y la magnetometría a través de las cuales pueden identificar las diferencias de los materiales presentes en el terreno y optimizar así, el modelado de las estructuras en la profundidad.

El equipo es multidisciplinar y distribuyen sus objetivos de investigación a lo largo de un amplio territorio. Morosini relata que hay gente que trabaja en zonas más modernas como es el frente de levantamiento de la sierra de San Luis“ es una zona muy interesante para investigar porque hay estructuras modernas que se concentran ahí. Por ejemplo, todo el borde de la Serranía del Lince, pasando por las sierras de La Punta, Villa de la Quebrada y Nogolí”, comenta.  Otra parte del grupo trabaja sobre el basamento, es decir, sobre las rocas que forman las sierras y cuyas estructuras son más antiguas. Particularmente se concentran en la zona de El Morro, Pampa de Invernada, La Carolina y San Martín. 


El trabajo científico en geología implica tiempo, dedicación y esfuerzo. Las campañas son extensas, suponen largas y complejas caminatas, tomas de registros y mediciones que suelen verse supeditadas a las condiciones del tiempo. “Lo que podemos ver en superficie es muy poquito y cuesta mucho trabajo estudiarlo porque muchas veces los accesos a las áreas de estudio son dificultosos, es un trabajo rutinario que lleva mucho tiempo. Sumado a ello, hay un porcentaje alto de lo que está aflorando en superficie que aún no está bien investigado, lo que vemos, es muy poco. Lo que está oculto en el interior de la corteza es aún un paradigma y el uso de métodos geofísicos nos permiten desentrañar ciertas cosas”, cuenta.

Pese a la complejidad de la tarea, algunas de las investigaciones han arrojado datos significativos que contribuyen a enriquecer la literatura científica existente y además, aportan datos que son centrales para la toma de decisiones vinculadas a políticas públicas. Hace poco tiempo, a través de una investigación de una estudiante que actualmente desarrolla su tesis doctoral, y utilizando una estación sismológica instalada en el camping de la Florida, se pudieron analizar sismos provenientes de lugares muy lejanos y se logró determinar que el espesor de la corteza debajo de San Luis tiene aproximadamente 43 kilómetros.  “A veces no podemos delimitar los detalles de las estructuras, pero sí, a grosso modo, podemos resolver estas incógnitas que son parte de la evolución del conocimiento”, resalta. En ese sentido, el proyecto también ha contribuido con datos de investigaciones de grado y doctorales que posibilitan identificar posibles acuíferos en zonas donde el agua es un recurso escaso.


El grupo tiene objetivos, propósitos y desafíos diversos. Uno de los retos implícitos en la tarea que desarrollan, tiene que ver con trascender las barreras del tiempo geológico. Al estudiar estructuras antiguas y modernas, deben acomodar las metodologías que el paisaje les impone. Otra complejidad que enfrentan, es el acceso a la tecnología de medición para lo que establecen vínculos y acuerdos con instituciones científicas de provincias vecinas. El ingenio y la pasión por la tarea, lo impulsa a la búsqueda de las mejores alternativas para dar respuesta a estas necesidades.

Ciencia joven

Todos los proyectos y procesos de investigación son un escenario clave para la formación de recursos humanos. Morosini destaca el valor que los jóvenes estudiantes de grado y posgrado tienen para el proyecto. Asegura que son ellos quienes garantizan el desarrollo de las propuestas investigativas. “Cuando organizamos y armamos el proyecto lo hicimos con una visión y una idea de que los pibes y las pibas que se están por recibir puedan, de alguna manera, encarar en sus trabajos finales algunos de los problemas que tenemos que resolver, por ejemplo, la sismicidad en San Luis. Ahora tenemos datos nuevos, antes no había datos confiables porque dependíamos de los registros de Mendoza o San Juan. En este momento estamos empezando a recoger datos locales, con nuevos equipamientos y son los estudiantes quienes toman esos registros y están aprendiendo las técnicas para procesar esos datos”, concluye.

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Biofísica: resolver problemas biológicos empleando la simulación computacional

Un equipo interdisciplinario liderado por el Dr. Rodolfo Porasso, docente investigador del Departamento de Física y del IMASL (UNSL-Conicet) estudia el comportamiento de membranas celulares frente a diversas situaciones problemáticas. Analizan mediante la simulación computacional, cómo reacciona esa capa superficial de las células frente al ingreso de fármacos, contaminantes, sustancias nocivas, o incluso, diferentes tipos de virus.

Del universo biológico, a este grupo de investigación le interesan las células y particularmente la membrana que separa el interior del exterior de la misma. Esta capa presenta particularidades de enorme complejidad, tanto en su composición como en su comportamiento frente a distintos compuestos o condiciones. “La membrana celular es algo extremadamente complejo, tiene muchos compuestos químicos, lípidos, colesterol, proteínas etc. Lo que hacemos es identificar, por ejemplo los lípidos, que a su vez tienen una característica peculiar ya que a una parte le gusta estar en contacto con el agua y la otra parte no. Desde la simulación creamos una especie de baldosa que representa esa membrana, le asignamos las características específicas como la carga, el tamaño, constantes eléctricas y así simulamos los distintos sistemas”, explica Porasso.

En la simulación computacional trabajan con distintos tipos de moléculas que penetran la membrana celular y allí pueden observar y analizar cómo se lleva a cabo ese procedimiento, e identificar cuáles son sus particularidades. “Tratamos de ver desde el punto de vista físico, cuál es el mecanismo en que los distintos fármacos pueden atravesarla. Empezamos con moléculas simples como la benzocaína que tiene 12 átomos, luego lo hicimos con el ibuprofeno, otra molécula también de unos pocos átomos”, señala. Actualmente estudian cómo funcionan los antibióticos que son moléculas mucho más grandes que con las que iniciaron la investigación. Porasso subraya que no tratan de explicar el mecanismo por el cuál estos antibióticos curan, sino el mecanismo por el cual ingresan a la célula.


Imagen de simulación: vesícula tratada con dos tipos de antibióticos (pintados de color azul). En la imagen de la izquierda el antibiótico no tiene efecto y la vesícula conserva su forma. En la imagen de la derecha, el antibiótico tiene actividad y se aprecia cómo la vesícula se deforma.

El equipo está integrado por físicos, biólogos moleculares, químicos, bioquímicos y farmacéuticos quienes aportan una visión diferenciada de los problemas que trabajan en el Proyecto. “Es un grupo bastante interdisciplinar y es totalmente transversal, todos colaboramos y vemos el mismo problema, pero cada cual, con su enfoque, y ahí es donde más enriquece la resolución del problema, porque a los físicos nos interesan los cambios de energía libre, fuerzas impulsoras, cambio de entropía. Para los bioquímicos es mejor estudiar la concentración y los biólogos moleculares se enfocan en las células. Cada cual tiene su mirada particular, y ahí es donde nos enriquecemos todos”, agrega.

Los conocimientos a los cuales se arriban en este Proyecto permiten dotar de información relevante a la industria farmacológica, a laboratorios y otros equipos de investigación con los que trabajan colaborativamente. “Nosotros hacemos ciencia básica, pero estas simulaciones aportan datos que posibilitarían hacer fármacos que sean más eficientes, optimizando la dosis al mejorar el mecanismo de inserción en la célula”.

Porasso explica que vienen trabajando con equipos del Instituto Multidisciplinario de Investigaciones Biológicas, IMIBIO UNSL-Conicet, con el Instituto Pasteur de Uruguay, las Universidades de Murcia y Valencia de España y grupos de investigación de Hungría. Estos nexos resultan muy significativos para el proyecto toda vez que les aporta la parte de la experimentación, la posibilidad de verificar en un experimento, los procesos simulados digitalmente. “La fuente de nuestros datos experimentales está en general, en Europa. Ellos hacen los experimentos y por suerte, hay una correspondencia muy grande entre los datos experimentales y nuestras simulaciones. Lo hacemos a doble ciego, para que no haya sesgo”, sostiene.

Como todo proyecto de investigación, éste tiene diversas líneas de trabajo. En una de ellas, un estudiante doctoral pudo desarrollar después de dos años de arduo trabajo, una simulación de un virus porcino. Uno de los mayores desafíos de este equipo es empezar a trabajar con distintos tipos de virus “intentamos desarrollar desde la simulación, algo que logre romper ese virus. Por lo pronto logramos construirlo y ya eso es un montón, construir un virus desde el punto de vista de las simulaciones requiere muchísimo esfuerzo, ahora veremos cómo lo podemos atacar”, anticipa.



Ciencia y vocación

La Facultad de Ciencias Físico Matemáticas y Naturales tiene una fuerte trayectoria científica. Hoy alberga muchos proyectos de investigación que dirigen científicos y científicas que también transitaron sus pasillos como estudiantes, y en esa etapa formativa, tuvieron referentes que contagiaron su pasión por la investigación. “Nuestra carrera es una carrera chica.  Cuando yo era estudiante los profesores que tenía nos conocían a todos, no hacía falta ni poner el nombre a la hoja, que ya sabía de quién era la letra. Eso formó un vínculo muy estrecho entre los docentes y los estudiantes (…) Dentro del departamento de física que científicamente es muy fuerte, hubo docentes como Giorgio Zgrablich, que es casi un prócer en la investigación en Argentina. Uno lo veía a él, cómo trabajaba, la pasión que tenía por la investigación y te contagiaba ese entusiasmo. Quien me formó a mí fue Julio Benegas, que dirigía el otro grupo grande de investigación y trabajar con ellos, haber sido estudiante de ellos, contagia. Ahora que estamos de este lado, uno trata de hacer lo mismo con los estudiantes actuales”.

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